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Redescubramos el rezo del Rosario en familia

Aprovechemos el tiempo en el hogar

Reunirnos en torno a la práctica de la fe, es sin duda una actividad enriquecedora para el alma. Más aún si damos a la oración, el lugar que merece dentro de nuestros hogares.

En estos meses de enero y febrero en que solemos disponer de mayor tiempo libre para pasar en casa, te invitamos a hacer de esta, la ocasión propicia para abrazar la práctica del rezo del Rosario.

Una oración simple y poderosa, centrada en la figura de Jesucristo. Que nos congrega en torno de la Virgen María, quien nos alcanza de Dios la gracia, paz y alegría para nuestras familias.

Además, esta oración resulta una oportunidad para formarnos en la fe, conociendo por medio de cada Misterio, distintos pasajes del Evangelio y también, forjando en los más pequeños de la casa, el hábito de orar.

También, podemos sumar 4 gracias asociadas a esta noble práctica, según lo enseñaron algunos de sus devotos (1):

1.- “Nadie que reza su rosario todos los días se convertirá en un hereje formal”. – San Luis María de Montfort
Debemos amar la verdad, apartándonos de todo error. Y en estos tiempos de confusión que azotan a la sociedad, el rezo del Rosario nos ayudará a no desviar el camino.


2.- “La familia que reza unida, permanece unida”. – Padre Patrick Peyton
A pesar de las dificultades que podamos atravesar, la oración en familia creará un vínculo inquebrantable.


3.- “El santo rosario es un arma poderosa. Úselo con confianza y se sorprenderá de los resultados “. – San Josemaría Escrivá
Ante los momentos difíciles que azoten nuestros hogares, en el Rosario encontraremos esa arma espiritual que nos ayudará a vencer toda adversidad.


4.- “El rosario es mi oración favorita”. – Papa San Juan Pablo II
Es tal la riqueza compactada en esta oración que sin duda goza de un lugar especial. Y nuestra Madre Celestial recompensa con especial afecto a sus hijos fieles a esta práctica.

Agradezcamos a Dios por regalarnos este tesoro, y pidamos la gracia de que en nuestros hogares jamás pase un solo día sin que se resuenen las bellas oraciones del Santo Rosario.

¡Recemos en familia, con amigos o individualmente!

(1) Fuente: ChurchPOP