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¿Qué ocurre el Miércoles de Ceniza?

3 claves para entender esta celebración

Este 14 de febrero será Miércoles de Ceniza, día en que daremos inicio a la Cuaresma, un tiempo litúrgico que nos invita volver nuestras vidas a Dios.

Es un llamado a la penitencia y la conversión que se evidencia en el gesto de la imposición de la cenizas que se realiza ese día.

1.- El inicio de esta tradición
La costumbre de imponer la ceniza se remonta a la antigüedad. En que, por medio de signos visibles, los pecadores públicos comenzaban un camino de reconciliación.

A partir del siglo XI la Iglesia impone las cenizas al comienzo de la Cuaresma, para recordarnos ese sentido de penitencia y conversión interior.

2.- Su significado
Este sacramental nos recuerda la condición caduca del hombre, de la tierra hemos sido formados y a ella volveremos, pues la muerte es la recompensa al pecado.

También fue con “polvo de tierra” que Jesús sanó a los ciegos. Polvo mezclado con saliva, es decir, es la Palabra que sale de la boca de Dios la que nos sana. Por ello en este día el ministro no solo nos signa con cenizas, sino que nos dice: «Acuérdate, hombre, que eres polvo, y en polvo te has de convertir» (Gén. 3, 19).

3.- Ayuno y abstinencia
Durante el Miércoles de Ceniza, así como en Viernes Santo, la Iglesia como Madre y maestra exige a todos los fieles guardar la práctica del ayuno y la abstinencia.

El ayuno obliga a los católicos desde los 18 hasta los 59 años a reducir los alimentos usuales. Mientras que la abstinencia exige a los católicos a partir de los 14 años a abstenerse de comer carne de mamíferos y aves de corral. También, todos los viernes de Cuaresma son días de abstinencia.

A estas prácticas podemos sumar alguna penitencia según nuestra propia realidad. Por ejemplo, “ayunando” de redes sociales.

Y tú, ¿qué otra práctica cuaresmal esperas realizar este año?

Fuente: Catholic-Link